EL EXPERIMENTO MEXICANO

23 07 2012

COLABORÓ: LORIAN KRMA

Minimizar o negar lo que nos pasa es una característica muy mexicana. Ya lo decía Octavio Paz en El Laberinto de la Soledad: “Máscara el rostro, máscara la sonrisa.” Minimizar o negar que hubo abusos y trampas, antes y durante la elección presidencial, es la típica respuesta mexicana a nuestros problemas. Pero ya es momento de romper ese esquema centenario. Y la manera de hacerlo es, primero, reconociendo que las votaciones no fueron limpias ni transparentes.

Sé que suena a obsesión. Pero, sencillamente, no nos podemos quedar callados si Enrique Peña Nieto, el candidato del PRI, llegó a la presidencia de México comprando miles o millones de votos y usando el presupuesto del estado de México para promover su candidatura por televisión. Eso viola la Constitución que exige votaciones libres. No debemos dejar para el próximo sexenio lo que podemos denunciar hoy. Ante las trampas es preciso exigir que se haga algo significativo, ejemplar, para que nunca más se repita este tipo de fraude. Nunca más.

Oigo por muchos lados –twitter, facebook, radio…- a mexicanos que dicen que todos los partidos políticos compran votos, que es preferible que Peña Nieto tome posesión y que la vida siga igual. O sea, que lo mejor es no hacer olas. Pero aquí hay que tomar partido y, con esto, no me refiero a apoyar a Andrés Manuel López Obrador, el candidato del PRD.

Hay que tomar partido con la democracia. Punto. Si López Obrador o Josefina Vázquez Mota, del PAN, hubieran ganado con trampas la presidencia, mi crítica sería exactamente la misma. Pero el que ganó con trampas fue Peña Nieto del PRI -un partido que durante 71 años se impuso a dedazo limpio en las elecciones presidenciales- y por lo tanto nos corresponde como periodistas cuestionarlo a él. No es una cuestión partidista. Es una cuestión ética.

Elie Wiesel, el premio Nobel y sobreviviente del holocausto, nos recuerda en su libro Noche que: “Debemos tomar partido. La neutralidad ayuda al opresor, nunca a la víctima.” En su caso, denuncia a los que no se atrevieron a confrontar a Hitler. En el caso mexicano, podemos aplicar el mismo principio y tomar partido con la democracia, no con los que abusaron de sus recursos económicos para comprar votos y llegar al poder.

Como periodistas no podemos -no debemos- apoyar a ningún candidato. Mientras más distancia mejor. Nada de regalos, comidas o inversiones en publicidad de políticos. Nuestra principal función social como periodistas (lo he dicho antes) es evitar el abuso de los que tienen el poder. Y en México esto significa, en estos momentos, denunciar las trampas electorales, identificar a los culpables, las cuentas y los montos que pagaron, e insistir en que el gobierno federal inicie una investigación independiente y que las autoridades electorales castiguen fuertemente a los tramposos. Con todas las pruebas presentadas no es posible concluir que Peña Nieto ganó limpia y legalmente.

El experimento mexicano con la democracia apenas lleva tres elecciones presidenciales. Esta y la del 2006 quedaron embarradas de dudas. Solo la del 2000 estuvo libre de cuestionamientos graves. Nos falta mucho por aprender. Sigo pensando que en Suiza o en Suecia, por poner dos ejemplos, algo parecido a lo que ocurre en México ya habría llevado a la anulación de las elecciones, a la descalificación del candidato que supuestamente ganó y a un montón de gente en la cárcel. En México no pasa nada.

La compra de votos en un país tan pobre como México tiene su base en una inocultable cultura de corrupción. México está entre los países más corruptos del mundo según Transparencia Internacional; el año pasado ocupó el lugar 100 entre 183 naciones. Su calificación fue de 3.0 puntos, en una escala donde cero es lo más corrupto y 10 lo menos corrupto.

Pero es un error el justificar el triunfo de Peña Nieto diciendo que lo normal en México es que haya corrupción y que se compren votos para ganar una elección presidencial. Es tan absurdo como decir que lo normal en México es que haya 60 mil muertos en un sexenio de lucha contra el narcotráfico.

Para que el experimento mexicano salga adelante hay que cuestionar y rechazar, antes que nada, lo que parece normal: las trampas, los muertos, la pobreza, la concentración del poder, la información y el dinero en pocas manos.

Creo en el experimento mexicano. Creo que México llegará a ser un país verdaderamente democrático. Creo que México tiene grandes periodistas -sobre todo mujeres: Elena Poniatowska, Carmen Aristegui, Alma Guillermoprieto, Adela Navarro (del semanario Zeta), Lydia Cacho, Anabel Hernández, Sanjuana Martínez, Guadalupe Loaeza, Cristina Pacheco, Denise Dresser y Denise Maerker, entre muchas otras- que informan con valentía y que no van a dejar que nos mientan. Creo en los 131 jóvenes que despertaron esta primavera un vigoroso, contestatario y necesario movimiento estudiantil. Creo en la lucha por los inmigrantes del Padre Alejandro Solalinde y en la búsqueda de la paz del poeta Javier Sicilia. Creo que millones de mexicanos ya no quieren más de lo mismo. Creo en un México nuevo y posible.

Pero lo viejo no acaba de morir en México. Y es ese olor a rancio y podrido que no me deja en paz.

Por Jorge Ramos Avalos.

Fuente: jorgeramos.com





LA FIESTA A LA QUE NO FUIMOS INVITADOS

12 07 2012

COLABORÓ: DANIEL

Por Juan Pablo Proal.

“El instrumento básico para la manipulación de la realidad es la manipulación de las palabras. Si tú puedes controlar el significado de las palabras puedes controlar a la gente que utiliza esas palabras”.

Philip K. Dick.

Enrique Peña Nieto ganó la elección presidencial de manera pulcra, ejemplar, quien diga lo contrario es un enemigo de las instituciones y, desde luego, un “pejezombie”.

Esta es la verdad que nos quieren imponer los hombres que viven del presupuesto.

Eres un buen ciudadano cuando no repelas y obedeces sin ninguna objeción, mientras acates la cultura del yanimodo-aseguiradelante. Si protestas es porque eres un ingenuo joven resentido, un ciego bajo el dominio del dictador-mesiánico-comunista Andrés Manuel López Obrador, un flojo-yaponteatrabajar, un periodista-militante, un troll pagadoparaatacaraLópez-Dóriga.

“Hoy vivimos la jornada con absoluta normalidad”: Leonardo Valdés Zurita, presidente del IFE.

“Es la contienda más equitativa que se ha dado en cuanto a la distribución de tiempos en radio y televisión, en cuanto a financiamiento público”: Pedro Joaquín Coldwell, presidente del PRI.

“Es mucho lo que hemos logrado los mexicanos y, por eso, a todos les pido que apoyemos a quien encabezará el Poder Ejecutivo”: Felipe Calderón, presidente de México.

“Ni la campaña de Enrique Peña Nieto ni el Comité Ejecutivo Nacional del PRI distribuyeron tarjetas de Soriana con ninguna finalidad, es una burda farsa”: Eduardo Sánchez, vocero del PRI.

“Nosotros estamos convencidos de la legalidad del proceso, que se sostendrá en los tribunales”: Luis Videgaray, coordinador de la campaña de Enrique Peña Nieto.

“Ya quedó demostrado que las tarjetas de Soriana son ajenas al proceso electoral… Es otro engaño de la gente de AMLO”: Ricardo Alemán, periodista.

Nuestro sistema de gobierno está basado en la fe ciega. Debemos creer como verdad absoluta el noticiero nocturno de Televisa (¿Tienes el valor o te vale?), las encuestas de consulta Mitofsky, las rabietas de Ciro Gómez Leyva, las excusas del IFE, la palabra de Felipe Calderón. No está permitido disentir: El Ejército jamás viola los derechos humanos, vamos ganando la guerra contra el narcotráfico, nadie compra el voto, la gente quiso que el PRI regresara, todas las personas que murieron a manos del narcotráfico eran criminales. Es el sinsentido absoluto: si viste lo que viste nosotros te decimos que viste otra cosa. No tolerar la injusticia es la pena máxima dentro de este régimen.

Producto de la compra y coacción del voto 30% de los sufragios: Alianza Cívica (Proceso).

Compras de pánico en Soriana ante el temor de que el PRI cancelara tarjetas (La Jornada).

Exigen al tricolor pago por servicios prestados en casillas (La Jornada).

“Ayer ibas a la casilla, votabas, tomabas una foto a la boleta marcada a favor del PRI, la mostrabas y te daban la tarjeta”, manifestó Rocío Ugalde (La Jornada).

Casilla especial de la Prepa Central tiene gente amotinada porque se acabaron las boletas, no hay policías (usuario de Twitter).

Matan a coordinador de Morena en Nuevo León (Proceso).

Amenazan a observador electoral de @CoparmexPuebla y @PueblaVigila tras tomar fotos a operador que movilizaba a favor del PRI (asociación Actívate por Puebla).

Observadores de #Coparmex denuncian compra de votos x gente del #PRI en Veracruz (usuario de Twitter).

Desde #Monterrey señalan que los teléfonos de la Fepade no contestan y por lo tanto no se puede reportar ilícitos electorales (cuenta de Twitter).

Denuncia la dirigencia estatal del PAN que se les está quitando una hora de votación a los tlaxcaltecas aunado a que la actitud prepotente de funcionarios del IFE esta desalentado la participación de la ciudadanía (periódico digital-Econsulta).

En mi colonia #PRI reparte vales por $700, te interceptan en casillas, intenté tomar fotos pero fui amedrentada (ciudadano en Twitter).

Elección plagada de irregularidades, concluye el #Yosoy 132.

¿Por qué el dos de julio México amaneció triste si ganó la voluntad popular?, si los votantes adoran a Enrique Peña Nieto, ¿por qué no hay rostros de felicidad?, ¿por qué el ambiente sabe a enojo, resignación, tristeza y miedo?, ¿dónde están los electores del PRI, por qué no se manifestaron la noche del primero de julio rebosantes de alegría?, ¿por qué Televisa y los medios oficiales insisten en meternos como supositorio el dogma que la elección fue limpia?, ¿acaso no lo fue?

El 61.7 por ciento de los electores que votaron no eligió a Enrique Peña Nieto, de acuerdo con el cómputo final del Instituto Federal Electoral. La organización Alianza Cívica, con 500 observadores en 21 estados del país, documentó que en el 21 por ciento de las casillas hubo violación a la secrecía del sufragio, además de que el 18% de los ciudadanos fueron intimidados por ir a votar: “La presión fue a favor del PRI-PVEM en un 71%, 17% a favor del PAN, 9% a favor del PRD, y 3% a favor del Panal”. Aún más, en el 14 por ciento de las casillas se registró “acarreo”.

De la información anterior se concluye que el voto del PRI, en su inmensa mayoría, fue el de la pobreza y la ignorancia. El de un país herido con 52 millones de pobres (11.7 en pobreza extrema, según cifras del Coneval).

El exprimer ministro británico Winston Churchill expresaba un pensamiento que encaja a la realidad del pasado primero de julio: “El mejor argumento en contra de la democracia es una conversación de cinco minutos con el votante medio”.

Las redes sociales, reflejo del ánimo ciudadano del sector más educado del país, son un mejor termostato para identificar cuál es el sentir de quienes no eligieron a Peña Nieto:

México, me dueles…

No reconoceremos bajo ninguna circunstancia a EPN.

México está de luto, pero no muerto… Prohibido rendirse.

Todo dinosaurio tiene su meteorito.

El PRI piensa que todos somos como el chavo del ocho… pendejos y nuestra más grande aspiración es una torta de jamón.

Al parecer esta es una fiesta, pero privada, y no fuimos invitados.

Fuente:  http://homozapping.com.mx





ORQUESTA CALLEJERA

10 07 2012

COLABORÓ: DANIEL

Banco Sabadell celebró 130 años de existencia en la calle con la Orquestra Simfònica del Vallès y los coros Lieder y Amics de l’Òpera y la Coral Belles Arts.

Sin palabras se queda la gente. Emocionante.





LOS VERDADEROS ZOMBIES

4 07 2012

COLABORÓ: DANIEL

Espero les guste, no vamos a bajar los brazos duro a esos pinches dinosaurios.

Saludos desde la hermosa republica de coapa.